Carpe Diem

Una piñata llamada Veracruz

Por Manolo Victorio

Cuitláhuac García Jiménez toca rasga el arpa, herencia de ‘La negra’ Graciana, concurre en ágapes opíparos de despedida, encabeza las coreografías en Xantolo, hace mole los domingos (Héctor dixit) y chapea con machete acapulqueño camellones urbanos; mientras Veracruz es una piñata de siete picos, acometida a palos por sus funcionarios.

El estropicio dejado en las seis primeras comparecencias de la glosa del sexto informe de gobierno ante los recién estrenados legisladores de la LXVII Legislatura, son escenas de un teatro de lo absurdo, una pincelada final del cuadro estridentista sexenal.

El ruido ha pespunteado más allá de la sustancia, el escandalo de las formas obtusas, francamente porriles de algunos titulares de despacho, han desdibujado las formas. El grito y la majadería han reinado por encima de la educación y la diplomacia.

A ojos vista Veracruz es una caricatura de sí mismo, ‘ayer maravilla fui, ay, Llorona, y ahora ni mi sombra soy’, canta en lastimera estrofa de La Llorona este maravilloso estado.

Ya que se vayan, es la consigna espontanea en las oficinas gubernamentales, donde la burocracia desea acelerar el reloj de la despedida, ansiosa por la llegada del nuevo funcionariado que mínimo refrescará la imagen visual de quienes hacen el trabajo en las dependencias del estado.

En estos días Veracruz se asemeja a un pasaje de La Odisea, donde Norma Rocío Nahle García, gobernadora electa armó a pie de suela, en recorrido a full de los 212 municipios veracruzanos tejió un tinglado, una estructura, un programa de gobierno de 80 propuestas para el estado de Veracruz, mientras Cuitláhuac, como Penélope, desteje por las noches la propuesta de quien le sucederá.

Apenas el jueves o1 de agosto pasado, la gobernadora electa se entrevistó en la CDMX con Zhang Run, Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de la República Popular China en los Estados Unidos Mexicanos.

Ahí, en el marco de esta cena, la gobernadora dijo que el estado será un imán para la inversión extranjera, ‘Veracruz ‘se pondrá de moda’ como sede natural de inversiones’, adelantó Nahle.

“(…) la mandataria electa ha sido clara en que las buenas relaciones institucionales con representantes y autoridades nacionales y extranjeras serán la punta de lanza de la expansión que Veracruz requiere para potenciar las riquezas que existen en cada una de sus regiones generando a la par, empleo, derrama económica y mejor calidad de vida”, se lee en el comunicado oficial distribuido en medios.

“Nos va a ir muy bien”, dijo eufórica la gobernadora electa hace apenas cuatro meses.

Los funcionarios de Cuitláhuac García Jiménez corren en riel contrario a los anuncios de bonanza empresarial industrial y, por ende, laboral en territorio veracruzano.

Quien abrió el orden al bat para deshacer es estatus quo empresarial, fue el tabasqueño Carlos Juárez Gil, titular de la Secretaría de Gobierno, al anunciar que la empresa trasnacional Granjas Carroll había sido notificada que tenía que salir de Veracruz, por violentar normas medioambientales.

Le siguió en esta cantinflesca comedia de enredos, Enrique Nachón García, secretario de Desarrollo Económico y Portuario, quien en el chacaleo con los reporteros de la fuente legislativa dijo que la empresa porcícola no se iría de la región de Perote, “ya platicamos con ellos, tienen que trabajar, tienen que mejorar, tienen que adaptarse, tienen que cumplir con la ley y si cumplen con la ley no tienen por qué irse, tienen que cumplir con la ley y es un trabajo que tienen que hacer todas las empresas”, dijo en explicación certera el encargado de que las empresas que inviertan en Veracruz tengan todas las garantías posibles para generar empleos.

Craso error. En la dialéctica cuitlahuista, en cuestión de horas, la narrativa del encargado del fomento y prosperidad de la empresa y la industria, tuvo que desdecirse, se vio forzado a dar un giro discursivo que lo plantó en la parcela de la vergüenza pública.

“Qué bueno que me dan la oportunidad de aclarar. lo comenté mal o se malinterpretó, yo no conocía la notificación que le había hecho la PMA directamente ya a Granjas Carroll, y entonces Granjas Carroll tiene dos opciones: observa la notificación que le dio la PMA, o puede acudir ante las instancias legales. La Secretaría de Desarrollo Económico no es una instancia legal ni normativa que pueda aclarar eso”.

El desmentido no vino mótu-próprio.

Fue señal inequívoca que el secretario Nachón no trae el power dentro de la estructura del gobierno saliente.

Que oso, dirán los youtuberos o creadores digitales en el nuevo léxico referente a la defensa de lo indefendible.

Enrique Nachón no merece esas groserías.

El otro episodio estridente fue la burda maniobra de introducir esquiroles adoctrinados en el rompimiento de las preguntas de los legisladores en la comparecencia del titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla.

Un par de individuos que fueron desalojados por orden del presidente de la Comisión de Seguridad Pública, Adrián Ávila Estrada (MC), profirieron gritos contra Héctor Yunes Landa (PRI) quien cuestionaba, como es su obligación legislativa, al titular de la SSP.

El zipizape verbal incluyó la referencia de por lo menos 14 grupos de la delincuencia organizada que transitan por territorio veracruzano, según datos exhibidos por Yunes Landa, y la respuesta de Cuauhtémoc Zúñiga que los exgobernadores priistas Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa entregaron la entidad al crimen organizado, se coronó con la agresión que sufrió la periodista Concepción Sánchez, a quien uno de los infiltrados que gritoneó a Héctor Yunes Landa, le manoteó el teléfono celular para impedir que le grabara.

La visita del titular saliente de la SSP fue manchada por estas burdas maniobras porriles que sólo se veían en el priismo rampante y avasallador del pasado.

Ahí quedó para el recordatorio de las cosas no hechas, las evaluaciones de control y confianza para 2 mil 444 elementos de la desaparecida Fuerza Civil, que sólo avanzó un magro 43 por ciento.

La evaluación de más de mil policías estatales ya será tarea del recién nombrado titular de SSP en el gobierno del Rocío Nahle García, Contralmirante de Infantería Marina Fuerzas Especiales, Diplomado de Estado Mayor, Alfonso Reyes Garcés.

Aparte del estercolero interno, la desaparecida Fuerza Civil, operadora de la tragedia en Totalco, que costó la vida a dos campesinos, fue el epicentro generador del escandalo que tiene que ver con las sanciones ambientales a la porcícola Granjas Carroll.

Un rompecabezas trágico.

Ya que se vayan, resume la exigencia popular.

Que ya suelten la piñata llamada Veracruz.

… de otro costal.

El escenario electoral de cara a la elección municipal se torna interesante, digno de platicarlo en una mesa del café La Parroquia.

Boca del Río será un crisol donde los partidos, fuerzas políticas y poderes facticos se enfrentarán en una elección singular donde se elegirá al sucesor de Juan Manuel de Unanue Abascal que cruza el pantano sin manchar el plumaje en un charm político basado en la educación y en la diplomacia. No se pelea con nadie ni suda calenturas ajenas el novel alcalde boqueño.

En reuniones con periodistas y aspirantes a una alcaidía que luego desmenuzaremos, se maneja la maquiavélica tesis que María Josefina Gamboa Torales y/o Indira Rosales San Román, quien quede de la resultante de la medición de fuerzas entre padre e hijo, competirían a la alcaldía boqueña sigladas por el Partido del Trabajo, sí, leyó bien, por el PT.

Luego entonces, en el PAN se mueven a priori, Francisco Gutiérrez de Velasco, quien ya bailó, pero se niega a sentarse y hasta ‘El búfalo’ Alejandro Cossío, amén de quien emerja nominado en palacio municipal.

Y a esta larga lista de aspirantes y suspirantes se suma Adrián Sigfrido Ávila Estrada, quien dijo en entrevista radiofónica para Avanradio Xalapa, que iría “con los ojos cerrados” (es decir, sin esfuerzo alguno), como candidato naranja en el municipio que ya gobernó del 2001 al 2004 bajo la tutela de Alfonso Gutiérrez de Velasco, pionero y tatiasca del panismo boqueño en aquellos años.

“En tres meses hablamos”, lanzó ‘El chino’ Ávila, sin ocultar que buscará la alcaldía de Boca del Río.

Y en estos tiempos de la cuatrote, el diputado emecista anda muy cerca del magenta.

Uff.

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