
Ángeles González Ceballos
Xalapa, Ver.-
La Sección 56 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), afirmó que no va a intervenir cuando se compruebe que alguno de sus integrantes cometió abuso, agresión o acoso sexual contra menores de edad o compañeras de trabajo.
Así lo definió el secretario general, José Reveriano Marín Hernández, quien refirió que el Comité Estatal exhorta, a lo largo del Estado, a maestros y maestras a cuidar su trabajo, a concentrarse en la enseñanza y estar pendientes de las y los menores.
Subrayó que a lo largo de los diversos recorridos que lleva a cabo, ha solicitado a los docentes que si ven alguna situación con intención de perjudicarlos laboralmente, es necesario dar aviso al Sindicato y ver la manera de apoyarlos.
Sin embargo, aclaró que en los casos comprobables de que algún agremiado dañó a algún niño, niña o adolescente, el Sindicato no intervendrá ante las autoridades educativas ni judiciales para que el acusado enfrente sus responsabilidades.
El líder magisterial exhortó a dar aviso al Sindicato cuando se percaten de actitudes reprobatorias por parte de profesores, personal administrativo de escuelas, de apoyo e intendencia.
“Si ven una situación que nos avisen, porque lo que menos queremos es que el compañero salga afectado. Somos muy conscientes que quien haya cometido tocamiento o abuso, el Sindicato no va a meterse en esos aspectos porque sí somos representantes.
Pero también somos padres de familia, tenemos hijos, hijas y tenemos que valorar mucho el respeto a nuestros compañeros, debemos valorar el respeto a nuestros semejantes”, indicó.
Marín Hernández recalcó que desde la Sección 56 se defiende y se cuida a la niñez veracruzana.
“Un niño o niña de kinder imagínense. En la ruta que trazamos si es de acompañar a quien es señalado, pero si alguien de verdad cometió ese tipo de circunstancia nosotros no intervenimos”, definió.
Finalmente, puntualizó que los profesores que enfrentaron un proceso judicial y se les comprobó haber cometido algún delito como acoso o abuso sexual contra estudiantes o compañeras de trabajo; son separados de la plaza laboral y es la Secretaría de Educación la encargada de decidir qué pasará con ese espacio.